Hoy nos despedimos de ti con el corazón lleno de amor y gratitud. Desde el primer día que llegaste a nuestra familia, llenaste nuestras vidas de alegría y momentos inolvidables. Tus travesuras, tus juegos y esa manera especial de hacernos sentir amados siempre serán parte de nosotros.

Sabemos que ahora estás en un lugar mejor, corriendo libre y feliz. Te recordaremos por siempre: tus ladridos en la puerta, las siestas a tu lado y esos miradas llenas de ternura.

Gracias, Homero, por ser nuestro compañero fiel y por darnos tanto cariño. Siempre estarás en nuestros corazones.

Con todo nuestro amor, Tu familia.