top of page



Hoy nos despedimos con el corazón lleno de amor y gratitud. Fuiste más que una perrita; fuiste parte de nuestra familia, nuestra compañera de aventuras y un rayo de alegría en nuestros días. Tu lealtad y dulzura iluminaron nuestro hogar.
Aunque ya no estés físicamente con nosotros, tu espíritu siempre vivirá en nuestros recuerdos. Extrañaremos tus juegos, tus miradas tiernas y esas colas que movías con tanto entusiasmo. Gracias por cada momento, por el amor incondicional y por llenar nuestras vidas de felicidad.
Descansa en paz, hermosa Canela. Siempre te llevaremos en nuestros corazones.
Con todo nuestro amor, Tu familia.
bottom of page








